Veintidós dos miniaturas que han caído en los 28 días de febrero, casi una al día, y además miniaturas grandecitas.
Diez espectros condenadores, 8 horrores de la cripta y 4 Vargheist.
Los espectros condenadores son miniaturas de plástico de Games Workshop. Los jinetes son de la última tanda de novedades que tuvieron los condes vampiro en 2011, los caballos son los clásicos de mediados de los 80. Al ser un kit dual con la caballería tumularia no había caballos para todos, así que como tenía caballos esqueléticos de los antiguos de sobra, los usé con los espectros, (a pesar de que no tengan barda), para evitar tener que comprar más cajas.
Los Vargheist son otro de esos kits duales, (vienen junto con los horrores de la cripta), que tanto le ha gustado sacar a Games Workshop en la última década, son miniaturas de plástico que, como los espectros condenadores, pertenecen a la tanda de novedades que salió junto con el libro de 8ª edición en 2011.
Los vargheist son la versión ofensiva del kit, son miniaturas voladoras con 3 ataques por barba de fuerza 5 y furia asesina, si no los torean por la furia pueden hacer un buen destrozo al rival. He hecho una unidad de 4 con oficial, las miniaturas tienen una calidad excelente y el que sean de plástico les hace poder tener unas poses muy dinámicas sin que la miniatura pierda equilibrio y caiga; lo malo como en el resto de este tipo de kits es la nula capacidad de transformación o variación de postura, lo que hace que si la unidad es numerosa quede muy clónica.
Y por último los guardianes de la cripta, la versión defensiva del kit dual. Son miniaturas con 3 heridas, resistencia 5 y regeneración, una buena roca en el campo de batalla. He pintado 2 unidades de 4 con sus respectivos oficiales. La verdad es que el concepto de la unidad, (que sean necrófagos gigantes), no me termina de convencer; hubiera preferido como unidad tamaño ogro resistente que hubiesen sacado miniaturas de ogros/trolls zombis o constructos de carne tipo monstruo de Frankenstein, hecho con un montón de piezas de distintos cadáveres; pero ya que tenía que comprar la caja por los vargheist decidí no complicarme la vida con marcas alternativas y tirar de estos.
La verdad es que, aunque el concepto no me termine de llamar, las miniaturas una vez pintadas quedan muy guapas, la única pega, como ya comenté antes es que pueden quedar muy clónicas en una unidad grande, para intentar disimularlo a la mitad les puse la espalda peluda que sobraba de los vargheist.
Y esto es todo, el siguiente mes seguiré, como no, adentrándome más en la nigromancia.
Un saludo.